sábado, 26 de julio de 2008

Faros

El velero Leuret se impacienta y tiene ganas de volver a navegar, de que las dichosas amarras le dejen libre y salga como corcel impaciente (y algo osado) a surcar mares y océanos, reales o virtuales. El grumete Sebastián me ha pedido que hagamos una pequeña escala en nuestro nuevo periplo en el famoso faro cercano a Sussex (el suyo y el mío, que hay sexo para todos cuando todos quieren) "The Bell Toot". Se trata de un célebre faro que visto desde tierra impresiona poco, la verdad. Vean, vean...



Pero que desde el mar es totalmente diferente:



Lo que no nos ha dicho el grumete Sebastián, que como saben mantiene una actividad frenética pese a sus ochenta y muchos años, es que allí tiene una serie de novias de todo pelaje y condición. No en vano la foto que he pillado en su mesilla me dice que, más que el faro, lo que quiere es ver otro tipo de "luces" en la costa de la pérfida Albión. Visto lo visto, voto por ir, ¡qué demonios! Nunca se ha perdido nada en Sussex ni en Tussex, leñe.

1 comentario:

  1. Me encantan los faros y todo lo ke representan.

    Un beso.
    Se te echa de menos.

    Olga.

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